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De héroe a villano por abrir la boca
El increíble derrotero de un ex policía que cayó en desgracia
Hace cuatro años fue exonerado de la Bonaerense después de haber denunciado a sus superiores. Asegura que sufrió una persecución y que no hay pruebas en su contra. En el medio perdió a su familia y pronto le rematarán la casa. Condecorado y elogiado por el ex gobernador Solá, no se resigna y sólo pide que alguien revise el expediente.
Por Gabriela Oprandi
Diploma de honor. El ex sargento Suárez recibió el premio “estímulo” por un acto de servicio.
No estar de acuerdo e incluso denunciar a superiores en cuerpos jerarquizados como el de la policía no parece ser una buena idea. La versión de un ex efectivo de la Bonaerense que hace cuatro años fue separado de la fuerza –según dijo, “con débiles fundamentos”– lo refleja claramente. Como parte de una misma pesadilla, el ex sargento Nahuel Suárez perdió el trabajo, se separó de su mujer y pronto le rematarán la casa. No reclama una segunda oportunidad porque está convencido de su inocencia; sólo pide que alguien revise su expediente. Por eso, junto a su abogada, Ana María Herren, presentó una demanda contra el Ministerio de Seguridad de la Provincia en el Juzgado Contencioso en lo Administrativo de San Martín.
El calvario y la peregrinación por distintos despachos de este policía que prestó servicio en la Bonaerense comenzó el 10 de enero de 2000, durante un operativo realizado en jurisdicción de la Comisaría 10ª del partido de Tres de Febrero. Ese día detuvo a dos personas que llevaban droga. Horas más tarde se sorprendió al enterarse de que esas personas habían sido liberadas por orden de sus superiores. Suárez entendió que la medida adoptada no era la adecuada y no lo pensó demasiado: al otro día se presentó en la fiscalía y contó su verdad. A partir de allí “empezaron los aprietes”.
El 21 de abril de 2004, cuando fue citado a declarar como testigo en el juicio contra los policías que él había denunciado, un integrante de la fuerza le apuntó a la cabeza con una escopeta. Suárez lo reconoció: “Era Víctor Melgar”, acusó. Si antes había denunciado a sus jefes cómo no lo iba a hacer ahora.
Felipe Solá, por entonces gobernador provincial, supo de la amenaza y, en el lanzamiento del Programa de “Reformas de Seguridad Ciudadana” que se llevó a cabo el 13 de mayo de 2004, anunció: “Nahuel Suárez me vino a decir que no podía más y que pedía su baja, y yo le respondí que no sólo no va a obtener su baja, sino que va a recibir un ascenso...”.
Esas palabras, reconoce Suárez, parece como “si se las hubiera llevado el viento”. “Primero me apoyaron, me facilitaron un crédito para que comprara una casa y después, como no sabían qué hacer conmigo, me echaron”, dijo a PERFIL.
Melgar fue enjuiciado y condenado a un año y seis meses de prisión en suspenso y a tres años de inhabilitación para ejercer un cargo. “Es verdad lo que me decían mis compañeros y mis jefes: ‘nadie confía en vos’. Pasé a ser una mala persona para ellos”, entiende Suárez.
Despedido. La vida de este policía no fue fácil después de la denuncia. Durante tres años fue trasladado de comisaría en comisaría hasta que el 16 de febrero de 2007 recibió la peor noticia: la baja del servicio. Según consta en la cédula de notificación, tres son los hechos por los que fue exonerado:
“...No tomó los debidos recaudos a los efectos de cumplir de manera fehaciente con sus superiores y compañeros en el cumplimiento de sus tareas habituales...”
“...Por grabar al subsecretario de Investigaciones, Enrique Galessio, sin orden judicial...”
”...Procedió a divulgar información sin autorización judicial de una denuncia que él mismo había tomado...”
La resolución quedó firme el 22 de abril pasado, cuando el ministro de Seguridad, Carlos Stornelli, ratificó la exoneración. Si bien Suárez admitió que le gustaría volver a la fuerza, para él “la Policía y los derechos humanos son agua y aceite”, y agregó: “Siempre demostré que soy inocente. En cinco minutos volvería a la fuerza y me daría el lujo de mostrarle a los que hablaron de más que estoy para seguir trabajando por la gente”.
Sigue
A favor de la causa
María Teresa Schnack es presidenta de la Comisión de Familiares de Víctimas Indefensas de la Violencia Social (Cofavi), una organización que nació en el año 1992 después que varias madres y padres que habían perdido a sus hijos por el accionar de la policía se conocieron haciendo colas en los juzgados y en los tribunales, en los estudios de televisión, o a través de abogados que los representaban. Fue así como se formó con familiares de víctimas para luchar contra la impunidad y con el único objeto de encontrar la verdad y la justicia.
Desde Cofavi, Schnack contó a PERFIL que apoyan el caso de Suárez, porque si son coherentes con su discurso, por más que haya sido policía, lo tienen que ayudar.
“Cofavi tiene un policía en su filas porque cuando llegó a pedir ayuda todavía lo era”, y agregó que “ahora tratamos de que el sueño de tener una policía capacitada, humanizada, que sea para servir, se acompañe por todos”.
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HACEMOS UN LLAMADO A LAS ORGANIZACIONES MUNDIALES A DEFENDER A UN POLICIA HONESTO:
Estimado Nicolas: desde ya agradezco mucho tu mail y saber que no estoy tan solo como lo creia. Hoy en diario Perfil ha salido una nota mia pero entiendo que fue la ültima.
Lamentablemente en mi pais los medios son manejado por el gobierno y si das a conocer cosas que a ellos les molestan te frenan todas las notas y tu caso pasa al olvido,. En esta lucha de tantos años, he perdido todo y las espectativas son nulas; han arbitrado todos los medios para quebrarme y en muchos puntos lo han logrado. Ellos sabian que mi fuente de fuerza era mi mujer y mis hijos hoy por hoy separado y a cien kilometros de ellos y sin trabajo. Saben que me debilitaron.
Lamentablemente ser honesto y trabajar conforme a Derecho y conviccionos no viciadas no son compatibles con los organismos oficiales y a partir de ese momento pasas a ser una persona peligrosa y desconfiable, hoy por hoy no encuentro un trabajo y cada vez mi situción es peor. Pero bueno, seguiré confiando en Dios y pelearé por enderezar mi vida.
Nahuel Suárez hoy está sin trabajo y a punto de perder su casa pero no se ...Nahuel Suárez es un ex policía bonaerense que primero fue condecorado por el ... www.diarioperfil.com.ar/edimp/0183/articulo.php?art=1433&ed=0186
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NAHUEL SUAREZ A JUICIO ORAL EL INTERMINABLE CALVARIO DE UN POLICÍA HONESTO
Hace unos años, este periódico contó la historia de Nahuel Suárez, un policía de la provincia de Buenos Aires que fue injustamente perseguido por haberse animado a denunciar la corrupción policial de sus propios superiores y compañeros de la fuerza (1).
Así fue publicado oportunamente: "Todo empezó el 10 de enero del año 2000, cuando Suárez patrullaba junto a un compañero la zona de Sáenz Peña, periferia de la comisaría 10a. de Tres de Febrero, donde se desempeñaba. Esa misma noche detuvo a dos sujetos que tenían en su poder un paquete de medio kilo de marihuana.
Horas más tarde, los dos detenidos fueron dejados en libertad a cambio de dinero por los superiores de la comisaría citada: el comisario Eduardo Luenzo, titular de la seccional; el oficial inspector Daniel Insaurralde, jefe de calle de la comisaría, y el sargento ayudante Pedro Florentín, también del servicio externo.
Gracias a Nahuel, los tres efectivos fueron condenados por el tribunal federal oral N° 4 de San Martín y se logró que el fiscal federal Jorge Sica secuestrara la documentación que había sido destruida junto a otros elementos".
Luego de esta movida, Nahuel comenzó a sufrir interminables persecuciones, amenazas y denuncias falsas de todo tipo, de las cuales de a poco está siendo absuelto por su falsedad intrínseca.
En este marco, el próximo martes 10 de junio, el Juzgado Federal Nº 2 de la ciudad de San Martín, a cargo del Dr. Martín Suárez Araujo, dará inicio al juicio oral y público contra el ex oficial subinspector de policía Víctor Melgar, quien puso y cargó una escopeta de grueso calibre en la cabeza del mencionado Nahuel.
Según cuenta agencia Nova, el hecho ocurrió el 21 de abril del 2004, aproximadamente a las 16 horas, "cuando Suárez transitaba junto a su custodia de la Prefectura Naval Argentina por la avenida Urquiza y, entre Tres de Febrero y San Martín, de la localidad de Caseros, partido de Tres de Febrero, fue interceptado por entre 10 y 15 patrulleros, con personas 'que blandían escopetas y diferentes armas cortas, las cargaban y las descargaban', según el propio relato del efectivo.
El increíble escenario no fue casual, porque ese mismo día Suárez iba a declarar en contra de otros tres policías –el comisario Eduardo David Luenzo, el oficial inspector Daniel Insaurralde y el sargento ayudante Pedro Florentín–, encargados de la comisaría 10º Sáenz Peña, también de Tres de Febrero, en una causa por la irregular liberación de detenidos que portaban marihuana, y que habría sido a cambio de dinero, ocurrida en el año 2000."
En la lona
Nahuel Suárez vive en estos días una verdadera pesadilla. Fue separado de la policía bonaerense, vive amenazado de muerte, tuvo que alejarse de su familia y hasta perdió la casa que había adquirido tras la cesión de un préstamo del Banco Provincia y que luego no pudo seguir pagando. A todo lo antedicho, se suma la decisión del ministro de Seguridad bonaerense, Carlos Stornelli, quien terminó aprobando su exoneración deshonrosa de la fuerza.
En el marco descripto, Tribuna de periodistas se comunicó con Nahuel a efectos de interiorizarse en su situación actual:
-¿En qué estado quedaron las causas federales que te iniciaron?
-Son causas que me iniciaron en el Juzgado Federal 1 y 2 de San Martín; en una estoy con "falta de mérito" y sin apelación de fiscal, esperando un tiempo prudencial para presentar el pedido de sobreseimiento, en la otra estoy con sobreseimiento definitivo firmado por el juez (Alberto) Suárez Araujo.
-¿Como actuó el nuevo secretario de Seguridad, Carlos Stornelli, en la causa de tu exoneración?
-El nuevo ministro firmó el día 22 de abril mi exoneración definitiva, ahora nos presentaremos ante el juzgado contencioso administrativo para buscar la Justicia que la policía y las autoridades políticas no buscaron. Más aún cuando el nuevo ministro confirmó la exoneración mía no olvidarse que los hechos que me endilgaron fueron tres: uno, suministrar información a un periodista, sobre lo cual el juzgado federal número 2 resolvió mi sobreseimiento en forma definitiva; dos, quedó demostrado que sólo se trató de rumores de pasillo sin ningún tipo de pruebas en mi contra; y tres, violación a la intimidad de Enrique Gallesio (ex subsecretario de Seguridad en la gestión Arslanián) por haberlo filmado cuando me estaba amenazando y diciendo que me vaya de policía en forma silenciosa porque sino podría aparecer con un tiro en la boca y todo pasaría como un suicidio.
Por lo que entiendo, el nuevo ministro (Stornelli) no a leído la causa y ha firmado y confirmado mi exoneración de una forma arbitraria.
-¿Cómo está tu situación financiera y familiar?
-Mi situación financiera es infrahumana, vivo de prestado y trabajando de changas cuando surgen. He perdido todo, desde casa hasta el derecho al trabajo por ser una persona no confiable por denunciar actos de corrupción. En lo familiar fue mi peor pérdida primero, porque mi esposa no aguantó más esta situación de inestabilidad, pérdidas económicas, inseguridad, al tener que vivir con custodia, y muchas veces no tener para darles de comer a mis hijos. Eso desgastó el matrimonio y se disolvió. Y dos criaturas vuelven a sufrir por tener un padre que actuó conforme a derecho.
Lo peor de todo, es que ellos también quedaron en la calle con la madre, por haber perdido la casa que estábamos pagando con el crédito que nos había otorgado el gobernador Felipe Solá y el Banco Provincia.
-¿Tenés pensado litigar ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos?
-Con el patrocinio de la doctora Ana Herren y la Comisión de Familiares de Víctimas Indefensas de la Violencia Social (COFAVI), de la cual soy miembro, estamos evaluando muy seriamente presentarnos ante la Comisión por la violación a los Derechos Humanos, tanto de mi familia, como los míos, por no haber encontrado justicia en el país que vivo. Y buscaremos "admisibilidad" de la causa.
-Si pudieras volver atrás, ¿Volverías a denunciar a los policías de Saenz Peña?
-Seria muy difícil volver a denunciar dando la cara, yo he perdido todo y lamentablemente todo esto a uno le enseña que debe mirar a un costado y no meterse o actuar siempre en el anonimato, porque la policía no perdona y mucho menos olvida.
-¿Qué depara a tu futuro de ahora en más?
-Mi futuro es incierto, dependo de terceros para ver si puedo seguir viviendo debido a que mi exoneración me condenó a no poder encontrar trabajo. Aparte, quedé inhabilitado para ocupar cualquier trabajo del Estado y lamentablemente dependo de algún político que tenga confianza y me ayude a volver a ser una persona con derechos. Tendré que esperar 4 años a que un juzgado contencioso vea que fue todo inventado.
A pesar del calvario que sufre, Nahuel regala a este periódico una frase esperanzadora, antes de despedirse: "la Justicia es como la verdad, tarda pero siempre llega". Este martes 10 de junio se sabrá si esto es real o no. A cruzar los dedos.
Nahuel Suárez está confundido, no entiende cómo es posible que la misma gente que hace unos años le dijo que era uno de los "mejores policías" de la ... derechosdeshumanos.blogspot.com/2007/05/polica-honesto.html - 121k -
PROHIBIDO DENUNCIAR: El interminable calvario del ex policía Nahuel Suárez
Nahuel Suárez está confundido, no entiende cómo es posible que la misma gente que hace unos años le dijo que era uno de los "mejores policías" de la provincia de Buenos Aires, ahora le de la espalda.
Durante años fue felicitado por personajes de la talla de Felipe Solá por haberse atrevido a señalar la mugre dentro de la fuerza policial y ahora es "ninguneado" por esas mismas personas como si tuviera un repentino ataque de lepra.
Nahuel fue cabo primero de la policía de la provincia de Buenos Aires y, gracias a sus denuncias, logró que fueran separados de la fuerza un comisario, un oficial inspector y un sargento ayudante por dejar en libertad a dos traficantes de drogas a cambio de una coima, y por destruir los documentos que acreditaban las detenciones.
Ese gesto, que debería haber provocado el reconocimiento de la sociedad, logró ser el disparador de una serie de problemas que culminaron en su separación de la policía hace un par de semanas, luego de un calvario judicial sin sentido.
Génesis de un problema
Todo empezó el 10 de enero del año 2000, cuando Suárez patrullaba junto a un compañero la zona de Sáenz Peña, periferia de la comisaría 10a. de Tres de Febrero, donde se desempeñaba. Esa misma noche detuvo a dos sujetos que tenían en su poder un paquete de medio kilo de marihuana.
Horas más tarde, los dos detenidos fueron dejados en libertad a cambio de dinero por los superiores de la comisaría citada: el comisario Eduardo Luenzo, titular de la seccional; el oficial inspector Daniel Insaurralde, jefe de calle de la comisaría, y el sargento ayudante Pedro Florentín, también del servicio externo.
Gracias a Nahuel, los tres efectivos fueron condenados por el tribunal federal oral N° 4 de San Martín y se logró que el fiscal federal Jorge Sica secuestrara la documentación que había sido destruida junto a otros elementos.
De manera inversamente proporcional, su vida empezó a complicarse: las amenazas empezaron a hacerse cada vez más elocuentes y, aunque intentó escapar mudándose una y otra vez, siempre lo encontraron (1).
Al mismo tiempo, se le inició un sumario interno por haber grabado subrepticiamente a un funcionario que amenazó su vida. Aunque suene increíble, aquel que lo amenazó no sufrió ningún tipo de reprimenda.
A Nahuel le costó su cargo en la policía.
En peligro
En mayo del año 2004, el gobernador Felipe Solá aseguró que apoyaría a Suárez: "Hay que respaldar a los buenos ejemplos dentro de la fuerza", dijo en esos días. Poco le duró la memoria, ya que a los pocos meses le dio la espalda por completo.
La misma custodia que en su momento le fue asignada, le fue retirada poco después y la oficina de Asuntos Internos de la Policía inició un sumario contra él por ilícitos inexistentes.
"Yo no entiendo nada, denuncié cosas muy graves, me jugué la vida y al final me terminaron usando. Al principio todos me felicitaban, yo era el mejor policía, pero ahora nadie me da bola. Arslanián nunca me recibió, Solá no me da la hora y el fiscal Sica en lugar de investigar los datos que denuncié, me ataca", aseguró Suárez a este periodista en una de las tantas charlas de café mantenidas.
Y no miente el ex policía: a pesar de que una alta fuente de la justicia federal de San Martín afirmó en su momento a diario La Nación que Suárez "ha demostrado un gran valor", el ministro de Seguridad bonaerense, León Arslanian, jamás quiso recibirlo.
"Cuando fue la purga de la bonaerense yo les serví a todos y era elogiado por todos, pero ahora la política está en otro lugar y a nadie le importo, aún cuando está en peligro mi vida y la de mis hijos", insiste Suárez, quien se muestra conmocionado a la hora de hablar de sus vástagos: una nena de siete años y un varón de cinco. "A mí, de última, que me hagan lo que quieran, pero que no toquen a mis hijos, es lo único que pido", dice.
Lo cierto es que este policía, que eligió seguir el camino de la verdad, se encuentra totalmente solo, en una pelea en la que, la ayuda que le fue prometida, nunca le fue dada. Quien escribe estas líneas ha intentado entender cuál es el motivo por el cual al ex policía se lo persigue de tal manera, pero nadie pudo brindarle las respuestas del caso.
En la Secretaría de Seguridad de la provincia de Buenos Aires -por citar un ejemplo- sólo han amenazado con querellas penales en caso de que este artículo fuera publicado, pero nada se ha aclarado sobre el tema Suárez.
¿A qué se debe el temor que se le tiene a este ex policía? Difícil saberlo, aunque no deja de llamar la atención la presión que se ejerce a los medios para que no hablen sobre su caso.
En las últimas horas, por caso, se ha "parado" un artículo que debió haber sido publicado hace semanas en diario La Nación. Algo similar ocurrió con el noticiero de Telefe cuando, a causa de una entrevista realizada a Suárez, un funcionario del gobernador Solá presentó una queja informal a las autoridades del canal y jamás se pudo televisar la segunda parte de ese reportaje.
Lo antedicho revela una elocuente obviedad: semejante preocupación sólo puede entenderse en el marco del temor que produce quien denuncia algo real.
Concluyendo
Hace algunos años, el periodistas Ricardo Ragendorfer dijo a este periodista que la policía era la "mafia perfecta". "Ellos pueden matarte y borrar todas las huellas después. Con mucho menos esfuerzo pueden armarte una causa judicial", aseguró oportunamente.
Viendo la enorme cantidad de casos que se han dado a lo largo de estos años, no hay dudas de que esto es así. Los buenos policías sólo pueden trabajar en la medida en que no denuncien casos de corrupción dentro de la fuerza. Si alguien se anima a patear el tablero, inmediatamente será aislado del sistema. Todo se mueve de manera corporativa en la policía y nadie aún se ha animado a intentar avanzar en el cambio que hace falta.
En este preciso momento, muchos de los corruptos compañeros de Nahuel siguen en sus respectivos cargos, mientras que el ex policía busca algún trabajo que le permita subsistir y mantener a sus propios hijos (2). Su desesperación en tal sentido es sumamente elocuente cuando se lo escucha hablar. "Nadie me da bola, y es terrible que te pase eso cuando te amenazan sin cesar", asegura Nahuel, sin poder terminar de entender por qué sufre este calvario.
A la nunca infaltable irresponsabilidad oficial, se le ha sumado el inentendible desinterés periodístico. ¿Será una nueva postal de la idiosincracia nacional?
Christian Sanz
(1) Ver http://www.lanacion.com.ar/Archivo/nota.asp?nota_id=599364
(2) Nahuel Suárez ha pedido al autor de este artículo que haga pública su necesidad laboral. Cualquier tipo de trabajo que alguien pueda ofrecerle, será bienvenido. El mail del ex policía es nahuelsuarez2002@hotmail.com
Nahuel Suárez hoy está sin trabajo y a punto de perder su casa pero no se ...Nahuel Suárez es un ex policía bonaerense que primero fue condecorado por el ... www.diarioperfil.com.ar/edimp/0183/articulo.php?art=1433&ed=0186 - 22k -
Asegura que lo echaron de la Policía por haber denunciado a sus superiores Un ex policía bonaerense sostiene que lo separaron de la fuerza luego de denunciar que sus jefes habían liberado a dos narcotraficantes. Fue ascendido y elogiado por el gobernador Felipe Solá y posteriormente exonerado por Asuntos Internos. Hoy no tiene trabajo. Participa en la ONG Comisión de Familiares de Víctimas Indefensas de la Violencia Social (Cofavi). Dice que va a recurrir a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Por Maria Helena Ripetta
De heroe a exonerado. Nahuel Suárez hoy está sin trabajo y a punto de perder su casa pero no se arrepiente de sus denuncias.
Nahuel Suárez es un ex policía bonaerense que primero fue condecorado por el gobernador Felipe Solá y luego fue exonerado de la fuerza por la Auditoría General de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad. Suárez sostiene que lo apartaron de su cargo por sus denuncias contra otros efectivos.
El 10 de enero de 2000 cumplía funciones en la Comisaría 10ª de Tres de Febrero cuando detuvo a dos personas que tenían medio kilo de marihuana. En la madrugada del 11 vio que eran liberadas por sus superiores y encontró el sumario en la basura. Hizo la denuncia ante el fiscal federal Jorge Sica. “El fiscal allanó, y detuvo al comisario y a los jefes de servicio de calle. Por razones de seguridad, me trasladaron para trabajar en la Cámara Penal de Garantías de San Martín”, explicó Suárez, quien empezó a recibir amenazas telefónicas y mensajes para que no se presente a declarar en el juicio oral contra los tres policías. Realizó las denuncias ante la Justicia y le otorgaron custodia de la Prefectura Naval.
“Un día antes del juicio iba en el auto con la custodia en Caseros y nos cruzaron dos patrulleros. Un oficial me apoyó la escopeta en la frente y la cargó. Nos trasladaron a todos porque me acusaron de insultarlo. Logré llamar al fiscal de juicio. Después de cuatro horas me dijeron que hubo una confusión y nos liberaron”, recuerda Suárez, quien finalmente declaró en el debate oral y los efectivos fueron condenados.
“El gobernador me elogió en un discurso y me mandó llamar. Me dijo que me quería cerca, me ascendió y me dio una condecoración. Me mudé a La Plata con mi familia. Pero no tenía destino, quería trabajar. Estuve ocho meses en casa, me querían hacer pasar por ‘ñoqui’ para que no siguiera denunciando”, sostuvo el ex policía, quien después de circular por varios despachos del Ministerio de Seguridad obtuvo una oficina para recibir denuncias contra personal policial, donde terminó siendo amenazado por mail. “Me mandan al Centro de Reentrenamiento de La Plata. Durante un simulacro hieren a un agente, y me quisieron acusar de ponerle una munición al instructor. La Policía de Los Hornos me quería hacer firmar por la fuerza un acta falsa, y me produjeron un esguince de muñeca”, dijo Suárez. Le iniciaron un sumario administrativo, lo acusaron de dar información a la prensa, de ser reticente a trabajar y causar malestar entre sus compañeros. El lo niega. Desde el 16 de febrero está fuera de la Policía.
"en cualquier parte se puede encontrar algo mejor que la muerte..."
Los músicos de Bremen (Die Stadtmusikanten von Bremen)
Cuento de Jackob Grimm
Los músicos de Bremen es el título de uno de los cuentos de los hermanos Grimm. Transcurre en la Baja Sajonia, (Estado de Niedersachsen) en los alrededores de la ciudad-Estado de Bremen.
Argumento:
La historia que se narra en el cuento de J. Grimm, "Los Músicos de Bremen" ( o podría decirse, “Los músicos transhumantes de Bremen” ) es la de cuatro animales: un burro, un perro, un gato y un gallo, cuyos dueños han decidido sacrificar, porque consideran que por su vejez, éstos sólo consumen comida y ya no les son útiles para el servicio doméstico.
"La tiniebla al igual que la luz, son estados de la mente, por ello, es posible verse sumido en la oscuridad aún en medio de la luz, y ver tan claro en la tiniebla como si fuera bajo la luz del día" ("La tiniebla", Cuentos Samurais. Guido Tavani, Bs.Aires, 2007, pg.34)
Nacido en Riachuelo-Osorno Chile-
- Estudios de Lenguas Clásicas y Filosofía (Universidad Austral de Chile - Valdivia).
-Profesor de Estado Mención Filosofía (Univ. de Chile -Santiago).
-Estudios de Postgrado (Filosofía y Psicología)en München- Alemania.(1966-1970)
-Magister (Göttingen) en Ciencias Históricas y Filológicas. (1982)
-Profesor de Filosofía y Vicerrector de la Universidad de Chile, Sede Osorno (hasta el 12.09.73) -Docente de Literatura e Historia Social de A. Latina, de las Universidades de Göttingen y Bremen.
Bailarín de Tango. Milonguero. Cultor de Karate, Tai-Chi y Esgrima Tai-Chi. Admirador de las Milongas de Jorge Luis Borges. Lector y estudioso de la Literatura clásica alemana.
